A diferencia de las películas de culto -bastante alejadas del circuito comercial- que veníamos viendo y comentando, la que ahora nos va a ocupar posee en grandes cantidades todos aquéllos aditamentos que Hollywood vuelca en cada superproducción que llega a las salas de todo el mundo: altos costos, parafernalia escénica, clichés de toda índole y actrices o actores excelentemente pagos. En el caso de "Agente Salt", éste último punto se potencia al extremo: la protagonista es nada menos que la actriz número uno del orbe, tanto en belleza y popularidad como en salarios: Angelina Jolie Voight, cariñosamente conocida como Angelina Jolie por todos los demás mortales del planeta.
La acción nos muestra a una espía cuya verdadera identidad es el meollo de la cuestión. Evelyn Salt, tal su nombre (obviamente, nuestra Angelina es quien le da piel) es una brillante agente americana enrolada en la CIA, cuyas comprometidas y arriesgadas labores en servicio la han llevado casi al status de heroína nacional. Pero en una oportunidad, ante la declaración de un ex espía ruso detenido, Evelyn cae bajo sospecha de ser una doble agente, cuya misión inmediata es asesinar al presidente ruso en su inminente visita a Estados Unidos para asistir a los funerales del vicepresidente de la nación más poderosa de la Tierra; y de ese modo crear una confrontación entre ambos países, que derive en un conflicto bélico durante el cual Rusia pueda recuperar su status perdido dentro de las super potencias mundiales.
Al saberse sospechada, Evelyn decide escapar de sus hasta entonces compañeros de labor, procupada por la suerte de su esposo, quien en alguna oportunidad arriesgara su propio pellejo para salvar a Evelyn de la muerte a manos de la policía secreta coreana. Obviamente este escape motivará un lógico incremento de suspicacias por parte de quienes compartían hasta ese momento con ella tan especial trabajo. Es allí cuando se desatará una vertiginosa persecución para dar caza a la glamorosa Salt, quien pese a verse involucrada en situaciones de harta violencia, nunca pierde esa atracción tan felinamente especial que Jolie sabe imprimirle a cada uno de sus personajes.
El film es -como mencionábamos en las primeras líneas- una típica súper producción hollywoodense de acción y desenfreno, y dentro de esos parámetros, es realmente bueno.
El director es el australiano Phillip Noyce, quien posee varios títulos importantes en su currículum: "Furia Ciega", "Juego de Patriotas", "Sliver: Invasión a la Privacidad", "El Santo", "El Coleccionista de Huesos", etc.. O sea, su especialidad parece ser a las claras el cine de entretenimiento y acción, donde ha cosechado muy buenos logros; y esta "Agente Salt" no se queda atrás. El vértigo es constante, la película es sólida, y el aburrimiento no llega en ningún momento. O sea, para lo que se pretende de este tipo de filmes, es más que suficiente.
Angelina Jolie es la agente Salt. Y también es "Agente Salt", la película toda. Traducido: ella es quien está todo el tiempo en pantalla, y la labor de todos los demás actores pasa completamente desapercibida. Es algo que suele ocurrir cuando Jolie aparece en escena... generalmente nadie tiene ojos disponibles para nada ni nadie que no sea ella. Todo esto obra en conocimiento de la archi famosa hija de Jon Voight, así que no tiene que esforzarse mucho en su labor actoral para sacarse una alta nota. Le basta sonreír, y que el director enfoque adecuadamente sus labios, no es necesario mucho más.
Igualmente, en este caso su trabajo es un poco más duro de lo habitual, porque Evelyn Salt no la pasa nada bien a lo largo de la película: sufre torturas, golpes, persecuciones, tiroteos, explosiones, más golpes, caídas, y otras calamidades. Y cuesta un poco creer que un delicado físico como el de Jolie Voight de Pitt pueda soportar tanto, aunque... sabido es que ella no es como los demás mortales, de modo que quizás su singularidad la ayude a sobrellevar todo lo que le pasa a Salt durante la trama. No quisimos decir que sea poco creíble, simplemente que si Angelina engorda un par de kilitos, estaremos más tranquilos por ella. Porque la queremos y admiramos, claro.
En síntesis: un producto típicamente americano, recomendable para quienes no vayan al cine a buscar enseñanzas, moralejas, ni experiencias inolvidables. Aquí lo único inmortal es la infinita seducción que emana de la señora esposa del afortunado Brad Pitt.
Título: "Salt" ("Agente Salt")
Año: 2010
Origen: Estados Unidos
Director: Phillip Noyce
Principales intérpretes: Angelina Jolie, Liev Schreiber y Daniel Olbrychski
Duración: 100 minutos
Calificación: 8 puntos
Comentó: Javier Parente, para OXIDO.-