Terriblemente sórdido -aunque no exento de una pizca de humor ácido- film francés dirigido por el polémico actor, director y escritor franco-polaco Roman Polanski (nacido Rajmund Liebling) durante el año 1976. Polanski, uno de los más afamados y controversiales cineastas de todos los tiempos, participó de esta "El Quimérico Inquilino" en los mencionados tres roles, dejando bien marcado su sello en esta impresionante obra.
La acción se desarrolla en París, donde un tímido individuo apellidado Trelkovsky (obviamente, Polanski) pugna por alquilar un lúgubre departamento, que forma parte de un no menos sórdido edificio propiedad de un anciano llamado Señor Zy, rol jugado por el extinto actor americano Melvyn Douglas. La principal característica del lugar es que su anterior inquilina se lanzó al vacío por la ventana, quedando muy lastimada e internada, debido a sus graves heridas, en un hospital.
Firmemente decidido a rentar el apartamento, Trelkovsky se dirige a visitar a la infortunada mujer al nosocomio, para averiguar en qué estado se halla. Allí se topará con una amiga de ésta, Stella (rol interpretado por la fascinante actriz parisina Isabelle Adjani - "Nosferatu", "Verano Caliente", "La Pasión de Camille Claudel", "Diabólique", entre otras), con la cual entablará una amistad y posteriormente una relación muy espaciada e informal.
Finalmente la desdichada ex inquilina fallece, por lo cual Trelkovsky logra acceder al departamento. Una vez en el edificio, recibirá todo tipo de advertencias de parte del propietario, especialmente referidas al trato con sus vecinos, los cuales no desean ser perturbados por ruidos molestos. Pese a su bajísimo perfil, Trelkovsky no logrará esquivar los reclamos y la ira de los otros moradores, especialmente luego de una animada reunión festiva junto a sus amigos en el apartamento.
La atmósfera de la película comenzará a enrarecerse, a medida que Trelkovsky comienza a obsesionarse; primero, con tratar de agradar y no molestar a sus recelosos co-inquilinos; y luego, al empezar a creer que es víctima de una perversa conspiración de los mismos.
Mencionábamos en el anterior párrafo la palabra "atmósfera". Pues bien, ésa es la clave de la película: el entorno del film es tan agobiante y siniestro, que va atrapando y sumergiendo al espectador en la conflictiva personalidad de Trelkovsky, imbuyéndose en el extraño comportamiento del personaje a través de las noches en su habitación, o recorriendo los oscuros y perturbadores pasillos de la antigua residencia. Todo es depresivo en "El Quimérico Inquilino", especialmente si nos referimos a la segunda mitad del desarrollo.
Polanski es un director fenomenal. Esta es, seguramente, una de sus obras más inquietantes y mejor logradas. La fotografía, el desenvolvimiento de la trama, y las imágenes que se suceden hacia el final del film, son simplemente brillantes. Y como actor, si bien no nos gusta tanto como en su rol de director, también logra dotar a su Trelkovsky de esa aura de pequeñez, introversión y atormentamiento que lleva consigo.
El resto del elenco está muy a la altura del film, siendo Isabelle Adjani quien se lleva -como en todas las películas en las que interviene- las mayores miradas y aplausos. El aura único que acompaña a la francesa sólo puede ser comparado con el de alguna otra actriz europea de culto, como es el caso de la holandesa Maruschka Detmers. Increíble Adjani, lástima que no toda su filmografía (unos cuarenta títulos) sea posible de conseguir en Argentina.
Para resumir, "El Quimérico Inquilino" no es -bajo ningún punto de vista- un film de sencilla visión. Puede que llegue a no gustar ni siquiera a los fanáticos del cine de suspenso o terror, pero es sin dudas un exquisito thriller psicológico de altísima escuela, de visión casi obligatoria para aquellos que no se conformen con ver cine solamente para entretenerse. Excepcional, por donde se lo mire.
Título: "El Quimérico Inquilino" ("Le Locataire")
Año: 1976
Origen: Francia
Director: Roman Polanski
Principales intérpretes: Roman Polanski, Isabelle Adjani y Melvyn Douglas
Duración: 126 minutos
Calificación: ☻☻☻☻☻☻☻☻☻
Comentó: Javier Parente, para OXIDO.-
La acción se desarrolla en París, donde un tímido individuo apellidado Trelkovsky (obviamente, Polanski) pugna por alquilar un lúgubre departamento, que forma parte de un no menos sórdido edificio propiedad de un anciano llamado Señor Zy, rol jugado por el extinto actor americano Melvyn Douglas. La principal característica del lugar es que su anterior inquilina se lanzó al vacío por la ventana, quedando muy lastimada e internada, debido a sus graves heridas, en un hospital.
Firmemente decidido a rentar el apartamento, Trelkovsky se dirige a visitar a la infortunada mujer al nosocomio, para averiguar en qué estado se halla. Allí se topará con una amiga de ésta, Stella (rol interpretado por la fascinante actriz parisina Isabelle Adjani - "Nosferatu", "Verano Caliente", "La Pasión de Camille Claudel", "Diabólique", entre otras), con la cual entablará una amistad y posteriormente una relación muy espaciada e informal.
Finalmente la desdichada ex inquilina fallece, por lo cual Trelkovsky logra acceder al departamento. Una vez en el edificio, recibirá todo tipo de advertencias de parte del propietario, especialmente referidas al trato con sus vecinos, los cuales no desean ser perturbados por ruidos molestos. Pese a su bajísimo perfil, Trelkovsky no logrará esquivar los reclamos y la ira de los otros moradores, especialmente luego de una animada reunión festiva junto a sus amigos en el apartamento.
La atmósfera de la película comenzará a enrarecerse, a medida que Trelkovsky comienza a obsesionarse; primero, con tratar de agradar y no molestar a sus recelosos co-inquilinos; y luego, al empezar a creer que es víctima de una perversa conspiración de los mismos.
Mencionábamos en el anterior párrafo la palabra "atmósfera". Pues bien, ésa es la clave de la película: el entorno del film es tan agobiante y siniestro, que va atrapando y sumergiendo al espectador en la conflictiva personalidad de Trelkovsky, imbuyéndose en el extraño comportamiento del personaje a través de las noches en su habitación, o recorriendo los oscuros y perturbadores pasillos de la antigua residencia. Todo es depresivo en "El Quimérico Inquilino", especialmente si nos referimos a la segunda mitad del desarrollo.
Polanski es un director fenomenal. Esta es, seguramente, una de sus obras más inquietantes y mejor logradas. La fotografía, el desenvolvimiento de la trama, y las imágenes que se suceden hacia el final del film, son simplemente brillantes. Y como actor, si bien no nos gusta tanto como en su rol de director, también logra dotar a su Trelkovsky de esa aura de pequeñez, introversión y atormentamiento que lleva consigo.
El resto del elenco está muy a la altura del film, siendo Isabelle Adjani quien se lleva -como en todas las películas en las que interviene- las mayores miradas y aplausos. El aura único que acompaña a la francesa sólo puede ser comparado con el de alguna otra actriz europea de culto, como es el caso de la holandesa Maruschka Detmers. Increíble Adjani, lástima que no toda su filmografía (unos cuarenta títulos) sea posible de conseguir en Argentina.
Para resumir, "El Quimérico Inquilino" no es -bajo ningún punto de vista- un film de sencilla visión. Puede que llegue a no gustar ni siquiera a los fanáticos del cine de suspenso o terror, pero es sin dudas un exquisito thriller psicológico de altísima escuela, de visión casi obligatoria para aquellos que no se conformen con ver cine solamente para entretenerse. Excepcional, por donde se lo mire.
Título: "El Quimérico Inquilino" ("Le Locataire")
Año: 1976
Origen: Francia
Director: Roman Polanski
Principales intérpretes: Roman Polanski, Isabelle Adjani y Melvyn Douglas
Duración: 126 minutos
Calificación: ☻☻☻☻☻☻☻☻☻
Comentó: Javier Parente, para OXIDO.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario